"...a orillas del mar, bebióse sorbo a sorbo su pasado..."
Pensar en Collioure es pensar en Machado y en sus últimos dias. Cuando peregrinas a ese pueblo te invade una tristeza que flota en el ambiente. Una nieblina se esparcía por todos los lugares en fin de año. Fuimos otra vez a todos los sitios dónde estuvo y nos marchamos con un frío irreparable en el cuerpo. Parece que Antonio habita en el aire. El mar es como él y las piedras cuentan toda su tristeza.
Volveremos, poeta. Como cada año, a saludarte.
GIBSON, IAN: Ligero de equipaje, Aguilar, Madrid, 2006.
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